Los niños condicionan nuestros viajes, pero no nos obligan a no hacerlos. Podemos ir de viaje con nuestros pequeños, siempre y cuando sepamos adaptarnos a ellos y al momento en concreto.
Los viajes con niños pueden ser muy diferentes a los que se acostumbraban a hacer sin ellos. Los pequeños traen muchos imprevistos y no podemos hacer turismo del mismo modo ya que ellos se cansan de otro modo y necesitan otras atenciones a lo largo del día que hay que priorizar por encima del turismo.
Preparación del viaje
Si viajamos en avión sin facturar, podemos comprarles una pequeña maleta de viaje de sus personajes favoritos como Gorjuss, Peppa Pig, Cars o su superhéroe favorito. La ropa para ellos no debe ir justa, se manchan, puede hacer más frio de la cuenta y con ellos no podemos equivocarnos. Yo suelo preparar el doble mde ropa que le pondría en un día normal en casa, por si acaso.
Para la documentación, podemos preparar una bandolera de Gabol para tener todo bien organizado. Con niños es mejor tener todo bien atado y controlado porque los imprevistos están a la orden del día.
Transportes en nuestro viaje con niños
Es realmente complicado viajar con tres maletas de mano, un carro con un bebé y moverte por los sitios andando. Si puedes centralizar maletas y llevar sólo una, te ahorras muchos quebraderos de cabeza. Así uno se encarga del carro y uno de la maleta, aunque tengas que llevar una bolsa colgada con las cosas necesarias del bebé durante el viaje.
Ya en el destino
Ir de viaje con nuestros pequeños puede hacer de nuestros viajes momentos muy inolvidables. También es posible que no te de tiempo a visitar todo lo que a tí te habría gustado hacer. Es por eso que yo siempre planeo los viajes con un 30% más del tiempo a cada lugar del que se suele recomendar para visitar ese sitio. Muchas veces te faltará tiempo incluso, pero no te preocupes, podrás volver más adelante y tendrás la experiencia de ir de viaje con nuestros pequeños.
